San Sebastián es una de las ciudades más bellas que podemos encontrar en España. El País Vasco en general es un buen destino que visitar y San Sebastián destaca entre las tres capitales vascas, principalmente pos su ubicación junto al mar que la haces destacar sobre las demás.
Hay muchas cosas que visitar en la capital Donostiarra y que podemos hacer en una visita de un fin de semana. Para los primerizos lo que no puede faltar es una subida al Monte Igueldo, un lugar desde el cual tendremos las mejores vistas de toda la ciudad. En su cima hay un antiguo parque de atracciones que a su vez se convierte en el mirador por excelencia de la ciudad. A la bajada, la cual la deberíamos hacer en su famoso funicular, podemos visitar la famosa escultura de Eduardo Chillida y símbolo de la ciudad.
En nuestra visita tampoco puede faltar un paseo por la famosa playa de la Concha, una de las más conocidas de España y cuyo nombre se debe a la forma de concha que esta forma junto a su vecina Playa de Ondarreta. Después de este paseo por la playa tenemos que ir a recuperar fuerzas a «la parte vieja», la zona antigua de la ciudad y donde se encuentran los bares más típicos de los famosos pintxos Donostiarras. Visitas a bares cómo el Goiz-Argi, Borda Berri o Zeruko no pueden faltar en nuestro paseo por esta zona de la ciudad. Otra opción es comer en alguno de los restaurantes de San Sebastián más afamados y propietarios de varias estrellas Michelín, pero eso se nos puede ir un poco de presupuesto.
Después de la comida podemos pasear por su precioso puerto pesquero para posteriormente entrar a visitar el Aquarium de San Sebastián, el acuario más antiguo la península. Fue construido en 1928 y recientemente fue remodelado pasando a ser uno de los acuarios más modernos de España.
Tras esta visita cultural al Aquarium tenemos la opción a su salida de subir andando al Monte Urgull, el otro monte representativo de la ciudad y desde el que podemos ver unas vistas similares a las obtenidas desde el Monte Igueldo pero con la perspectiva contraria. Subirlo andando tan sólo nos costará 20 minutos.
A la bajada, y ya para terminar, podemos visitar el Museo de San Telmo, otro de los museos más reconocidos de la ciudad y que también ha sido recientemente remodelado. Esta construido en un antiguo convento y es un lugar muy bonito que merece la pena visitar sin ninguna duda.
Cómo veis, hay muchas cosas que ver en San Sebastián. Tan sólo os hace falta una buscar una escusa para hacer una escapada a esta preciosa ciudad y disfrutarla a fondo.